lunes, 5 de marzo de 2012

89 UMPA.

 
El Maestro enseñaba que el cambiar,
aunque fuera para bien,
conllevaba siempre efectos secundarios
que convenía examinar con cuidado
antes de decidir el cambio:
La invención de la pólvora
significó una estupenda protección contra los animales salvajes,
pero también dio lugar a las guerras modernas;
el automóvil agilizó las comunicaciones,
pero también agravó la contaminación atmosférica;
la tecnología moderna salva muchas vidas,
pero también suprime una serie de esfuerzos físicos,
con lo que nuestros cuerpos se debilitan.

"Érase un hombre", dijo el Maestro,
"con un ombligo de oro que le ocasionaba constanes apuros,
porque, siempre que se bañaba,
era objeto de toda clase de bromas.
El hombre no hacía más que pedirle a Dios
que le quitara aquel ombligo.
Por fin, una noche soño que un angel se lo ´desenroscaba´"
y lo dejaba encima de la mesa,
tras de lo cual se esfumó.
Al despertar por la mañana,
comprobó que el sueño había sido real:
allí, sobre la mesa,
estaba el brillante ombligo de oro.
Entusiasmado, se levantó de un salto...
¡y el culo se le desprendió y cayó al suelo!"

No hay comentarios:

Publicar un comentario